Las puertas automáticas no son un invento moderno sino que fueron inventadas hace más de 2000 años.
Fueron diseñadas por un inventor greco-romano que detalló todo el sistema de puertas automáticas en «La Neumática». Para mover una puerta sin la necesidad de un individuo, creo un ingenioso sistema de poleas que, gracias al vapor de agua, se conseguía accionar un sistema que abriera las puertas de manera automática. Y no satisfecho con ello, añadió su toque personal e hizo que, además de abrirse las puertas automáticamente, también sonaran trompetas.
A continuación te contamos algunas de las curiosidades de las puertas automáticas que quizás no conocías
1. No apuntar al motor con el mando
Normalmente cuando queremos abrir la puerta con el mando a distancia, apuntamos a la puerta o al propio motor, porque creemos que es dónde recibe la señal del mando. Pero esta creencia viene dada por costumbre, ya que cuando utilizamos el mando de la televisión señalamos la tele o el repetidor. Las puertas automáticas funcionan a través de una señal de radio que produce el mando a distancia. Las ondas se propagan por igual alrededor el mando, traspasando paredes y otras barreras hasta llegar al repetidor y accionar la orden de abrir o cerrar la puerta.
2. Todo debe abrirse manualmente
La tecnología evoluciona y cada vez tenemos más fe ciega en que todo funcionará, pero ¿qué pasaría si un día se bloquea la puerta justo antes de salir de casa o el mando a distancia deja de funcionar? Tranquilo, no pasaría gran cosa. Todas las puertas y sistemas automatizados deben poder abrirse manualmente con una llave, una palanca o algún mecanismo que permita desbloquear la puerta.
3. Difícil quemar el motor
En contra de la creencia popular de que el motor se puede quemar a causa del sobre-esfuerzo que se genera al utilizar la puerta automática muchas veces; quemar un motor es muy difícil y poco habitual, ya que los automatismos disponen de termostatos que cortan la entrada de electricidad si se detecta un exceso de calentamiento en el bobinado.
4. Puertas legales e ilegales
Desde el 1 de mayo de 2005 es obligatorio que todas las puertas dispongan de:
- Etiqueta de Mercado CE.
- Declaración de conformidad del fabricante o instalador.
- Manual de instalación.
- Manual de uso y mantenimiento.
El fabricante o instalador es el encargado de entregar el Certificado de Ensayo y de los manuales. Por otro lado las puertas anteriores a este fecha, si no han sido modificadas tienen que incorporar las medidas de seguridad mínimas.
5. Las copias de mandos son difíciles
Cada mando dispone de tres características propias: la frecuencia, el código y el sistema. Teniendo en cuenta que hay una cantidad muy elevada de mandos a distancias, de marcas y modelos diferentes y hay que recrear las tres características de cada uno, se vuelve especialmente complicado intentar copiar o trampear un mando a distancia.
6. Cuidado con engrasar la puerta
Como casi todo en la vida, las cosas, si son en exceso, nunca son buenas. Pues lo mismo pasa con engrasar demasiado la puerta. Es importante que las guías y el motor estén bien lubricados, pero utilizar una cantidad elevada o no utilizar los productos adecuados provoca que las puertas se atasquen.
Lo recomendable es engrasar la puerta una vez al mes con un lubricante líquido.